La Biblioteca de Altaïr Ibn-La'Ahad fue una cámara subterránea en Masyaf, una fortaleza siria que albergó a los Asesinos sirios durante unos doscientos años. La biblioteca, creada alrededor de 1247 por el Mentor Altaïr Ibn-La'Ahad, reunía gran cantidad de libros hasta el ataque mongol de 1257, cuando los hermanos Polo y Darim Ibn-La'Ahad—hijo de Altaïr—evacuaron todos los libros. Altaïr murió encerrado en la biblioteca cerca de la Segunda Manzana de Edén a los 92 años, dejando la puerta sellada de una forma que sólo se pudiesen abrir con cinco llaves, las cuales los Polo escondieron en Constantinopla.