Los Fragmentos del Edén eran piezas de equipamiento tecnológicamente avanzadas creadas por la Primera Civilización, con varios propósitos. Cada una poseía propiedades únicas, y todas eran conocidas por ser capaces de revelar los pensamientos de uno o más individos por voluntad del usuario.
Historia[]
Los Fragmentos del Edén poseen una larga historia que forma parte de la historia de la humanidad. Los Fragmentos del Edén fueron creados por la Primera Civilización para controlar a la humanidad y así hacerlos trabajar como esclavos. Los humanos reaccionaron a los efectos de los Fragmentos del Edén a través de un único neurotransmisor implantado en sus cerebros.